domingo, 25 de abril de 2010

¿Quienes Somos?

Nuestra Historia

La Iglesia San Romero de Las Americas nace el domingo, 29 de agosto del 1999 a raiz de la forzada salida de la congregacion Latina de la Iglesia Episcopal Santa Maria (Saint Mary’s Episcopal Church) de su espacio de adoracion. El domingo, 1 de febrero del 2000, la congragacion de la Iglesia San Romero de Las Americas, en su asamblea anual efectuada en el Bronx decide convertirse en una iglesia independiente. Esto, como resultado del rechazo de la Diocesis Episcopal de Nueva York hacia nuestro ministerio de liberacion y de transformacion. Nuestra historia, es una ligada a la historia del pastor fundador de nuestra iglesia, el P. Luis Barrios, es una que refleja una historia de dificultades y tension con la Diocesis Episcopal de Nueva York por el solo hecho de practicar el evangelio de Dios de una manera relevante y reverente a la comunidad Latina y a las comunidades hermanas marginadas y oprimidas en la ciudad de Nueva York y en el mundo (como por ejemplo: la comunidad homosexual, prisioner@s politic@s en los EEUU, l@s usuari@s de drogas intravenosas entre otr@s).

Desde el inicio de La Iglesia San Romero de Las Américas hemos vivido un via-crusis como resultado de la falta de un espacio propio de adoracion. Nuestras misas se llevaron a cabo en parques, en sotanos de edificios, en la iglesia hermana metodista- La Resureccion, fuimos acogid@s por grupos como La Peña del Bronx, y finalmente, nos abrieron las puertas en Alianza Dominicana en la comunidad de Washington Heights. En este ultimo espacio, permanecimos desde el año 2001. En agosto del 2009, la Iglesia San Romero encontro un nuevo hogar, el cual ha convertido en su espacio de adoracion en Washinton Heights. 

En nuestra asamblea anual de marzo del año 2003, nuestra congregacion adopto dos resoluciones relacionadas a nuestro estatus como iglesia y nuestra relacion con la denominacion Episcopal y la denominacion Iglesia Unida de Cristo (United Church of Chirst- UCC). La primera resolucion aprobada de manera unanime, establece que “debido a la falta de interes y de respeto de la Diocesis Episcopal de Nueva York hacia nuestra congregacion, suspendemos todo proceso de negociacion para ser reincorporadas a la comunion del cuerpo Episcopal.” La segunda resolucion aprobada, establece que “debido al interes, apoyo y respeto por parte de la Iglesia Unida de Cristo, abrimos las puertas al proceso de afiliacion a esta denominacion.” En la asamblea anual de la Conferencia Metropolitana de la Iglesia Unida de Cristo durante el mes de mayo del 2003, nuestra congregacion fue aceptada e introducida al cuerpo de la Iglesia Unida de Cristo.

Luego de la afiliacion de nuestra congregacion a la denominacion de la Iglesia Unida de Cristo, el P. Luis Barrios, en funcion de pastor Episcopal, pide a la Diocesis Episcopal de Nueva York que le permita oficiar en la Iglesia San Romero de Las Americas-UCC, la cual ahora pertenia a la comunidad de la Iglesia Unida de Cristo. Debido a las dificultades previas con la Diocesis Episcopal y el estatus activo del pastor fundador de nuestra iglesia, el P. Luis Barrios como pastor Episcopal, la Diocesis Episcopal de Nueva York en su “derecho” a decidir la ubicación de sus pastores Episcopales no concede el permiso al P. Luis Barrios a oficiar el pastorado en la Iglesia San Romero de Las Américas- UCC. Es por esto, que en la asamblea anual de mayo del 2004, el P. Luis Barrios presenta su renuncia como pastor de la Iglesia San Romero de Las Américas- UCC, y en esta misma asamblea, es afirmado como guia espiritual de nuestra comunidad de fe.

En febrero del 2007, el P. Luis Barrios presenta su renuncia a la posicion de guia espiritual de la Iglesia San Romero de Las Américas- UCC. Durante esta asamblea, se afirma el liderazgo de Claudia De la Cruz, para entrar en el proceso de ordenacion con la Iglesia Unida de Cristo, ser parte de un proceso transicional y de revitalizacion, y convertirse en pastora de la congregacion una vez acreditada por la denominacion. Aunque la renuncia del P. Luis Barrios era de hacerse efectiva a partir del 1 de febrero del 2008 , en noviembre del 2007 el P. Luis Barrios hizo inmediata su renuncia como guia espiritual de la Iglesia San Romero de Las Americas-UCC. Claudia De la Cruz, en su posicion de presidenta del Colectivo de Trabajo y en el proceso de ordenacion con la Iglesia Unida de Cristo pasa a ser la guia y pastora de la Iglesia San Romero de Las Americas-UCC.

Nuestra Misión

La Iglesia San Romero de Las Américas-UCC radicada en la ciudad de Nueva York- es miembro de la Asociación Metropolitana de la Iglesia Unida de Cristo de la Conferencia de Nueva York y es una congregación que abre sus puertas a la diversidad y la afirma- es una comunidad de fe cristiana la cual proclama y trabaja por la liberación a nivel espiritual, fisica, personal y comunitario, a través de la práctica de rituales religiosos.

La mision de nuestra iglesia, es parte del proyecto amplio de Dios, la creacion del Reino de Dios aquí y ahora. Entendemos que el Reino de Dios no es una promesa de esperanza para el futuro, pero mas bien, es un plan a implementarse por nosotr@s guiad@s por el Espiritu de la verdad (Jn.14: 8-27) que se manifiesta en la practica de la paz con justicia. En la implementacion de este plan de liberacion espiritual, personal, socio-politico y economico, que es el Reino de Dios aquí y ahora, nos esforzamos por continuar el legado y la practica de nuestro hermano y compañero Jesus a traves del amor (Lc 10:25-37; Jn 13:34), la compasion y la solidaridad (Mt. 9:36; 20:34) y el servicio o accion (Mr. 10: 42-45) que transforma condiciones de opresion en experiencias de liberacion.

Para cumplir nuestra mision y mantener una coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos, la Iglesia San Romero de Las Americas-UCC a traves de sus ministerios promueve y asume la acción.

§ del servicio o acción transformadora (Mt. 25: 34-46) en la comunidad de fe y con quienes sufren opresion, explotacion, marginalizacion, discriminacion u otras condiciones de afliccion y deshumanizacion que alteran el orden de paz con justicia, bienestar y plenitud de vida que Dios creo.

§ la proclamación de las buenas nuevas (Lc 4:18- 22). O sea, anunciar la posibilidad de transformacion personal y colectiva en el proceso de crear un mundo nuevo y mejor.

§ la formación o la edificación (Mt. 28: 19-20; Lucas 6: 40) teo-politica de quienes forman parte de esta comunidad de fe para el testimonio.

§ la comunión o el compañerismo (Hch. 4: 32- 35) que da vida al mensaje de Dios, creando una comunidad saba y restauradora.

§ la adoración o la celebración comunitaria (Hch. 2: 46-47) de la practica de nuestra fe a traves de la oracion, los canticos, la predicacion, el ofertorio, y la eucaristia.





Nuestra Declaración de Fe

Creemos en Dios, que es madre y padre, que vive y reina con su creacion y en su creacion. Entendemos que Dios se manifiesta en la practica de la justicia social, politica y economica.

Creemos en Jesus Cristo, hijo de Dios, profeta, hermano y compañero quien vivio practicando el amor, la solidaridad y la compasion en el proceso de crear el Reino de Dios en la tierra trayendo las buenas nuevas (Lc. 4:18-22) a su pueblo oprimido; quien fue cruxificado por el imperio romano por causa de su mensaje y practica liberadora; quien resucito al tercer dia según las escrituras, en el maximo acto de resistencia ante procesos de opresion, y a la ves dando testimonio de la justicia de Dios; y quien ascendio al Cielo, dejando en nosotr@s al Espiritu Santo.

Creemos en el Espiritu Santo, soplo de vida y verdad que nos guia en nuestra implementacion de la comision dada por nuestro hermano y compañero Jesus de continuar el proyecto de liberacion de Dios, la creacion del Reino de Dios aquí y ahora.

Creemos en la capacidad de los seres humanos de desarollar su espiritualidad en la practica del amor, la compasion, la solidaridad, la paz con justicia y el respeto hacia la Creacion de Dios. Entendemos que la religiosidad no define la espiritualidad, y por eso creemos que quienes practican la justicia y no se auto-definen como religiosos, son espirituales, y por lo tanto, parte de nuestra comunidad de fe.

Creemos en los sacramentos del bautismo, el matrimonio, la confesion de pecado y la eucarisita. Entendemos que estos sacramentos son compromisos personales y comunitarios donde asumimos y afirmamos desde lo personal un compromiso para impactar a la colectividad de manera positiva.

Creemos en la diversidad creada por Dios para su Creacion como un regalo al cual estamos llamad@s a aceptar, cuidar, respetar y celebrar.

Creemos que como iglesia somos llamad@s a ser una iglesia profetica. En la tradicion de profetas, profetizas y apostoles, Diosa llama a la iglesia a decir y practicar la verdad, liberar a l@s oprimid@s, a cuidar a l@s enferm@s y estar al lado de l@s pobres del mundo.

Confiamos en que Dios, por su gracia, nos permita actuar sin miedo y con valentía luchando contra toda maldad y que nos libre de envolvernos en procesos de negociación con la opresión, explotación, alienación, y/o colonización que atenta contra la vida humana, animal o el medio ambiente. Así pues, que podamos utilizar reverentemente nuestra fe en la búsqueda de la justicia social, cultural, política, económica, sexual y religiosa tanto en nuestras comunidades como también con otras naciones. En cuanto a lo personal, cultural e institucional, nos comprometemos a luchar por la erradicación de los pecados sociales como son la supremacía masculina, heterosexismo/homofobia, clasismo, racismo, etnocentrismo, y xenofobia por solo mencionar algunos. Estos pecados son los que destruyen el plan original de Dios de un mundo ordenado y organizado sobre la base de la justicia. Otra prioridad incondicional de nuestra misión como Iglesia, es insistir y hacer hincapié en la inclusión y participación de las mujeres, como también de nuestros(as) hermanos y hermanas homosexuales, lesbianas, bisexuales y transgéneros en cada faceta de la vida de nuestra Iglesia. Reconocemos que la Iglesia es una señal de que el momento para reconciliar todas las relaciones a través de la justicia ya ha comenzado.